26 de noviembre de 2011

No te dejes engañar, no dejes que te pegue.

Por estos días he pensado en dedicar una entrada a la violencia de genero.


Si tanto te amara, como dice el, no te pegaría.
Si tanto te amara, como dice el, no te dejaría en ridículo.
Si tanto te amara, como dice el, no controlaría como te vistes.
Si de verdad te quisiera, no controlaría tu móvil.
Si de verdad te quisiera, no te aislaría de tus amigos, o de tu familia.
Ponle freno, no permitas que te pegue, que te humille, que te insulte. No permitas que te controle como te vistes, a quien llamas y a quien no.
No permitas que te degrade, que te grite, que te diga lo que tienes que hacer, no permitas nada de eso, porque si de verdad te quiere, no lo haría.
¿Porque tiene que gritarte? No eres una marioneta, el no manda encima de ti, ¿que pasa? ¿Que tiene poder ante ti?
Nunca perdones que te sea infiel, no le perdones nada, porque lo que sucede una vez, sucederá una vez mas.
Se que quieres que esto solo es una pesadilla, y que quieres que mañana todo se olvide, pero no será así.
Con el primer empujón y el primer puñetazo te conformas con un simple abrazo, ¿de que te vale? Recuerda esto: Callará tus lamentos con brutalidad, pero recuerda: NUNCA PERDONES, LO QUE SUCEDE UNA VEZ, SUCEDE UNA VEZ MAS.
SÉ mas fuerte que esa bestia, NO TE SALTES LAS SEÑALES, ELIGE VIVIR.
PONGÁMOSLE TARJETA ROJA AL MALTRATO.


Si conoces, casos de maltrato en tu familia, o tu misma la estas viendo: no dejes que termine por lo peor, párale los pies.


Aquí os dejo el numero de teléfono de asistencia contra la violencia de genero, 016 que os atenderán las 24h del día, y ademas, a través de este número de marcación abreviada, las mujeres que sufran malos tratos podrán recibir información, asesoramiento jurídico y atención en línea para solucionar la situación en la que viven.


TOLERANCIA CERO!


18 de noviembre de 2011

El tiempo pasa, las heridas se curan.

     Te crees que seguiré asi toda la vida? Já, te equivocas hermano, ya ha pasado tu tiempo, ya es hora de que te des cuenta de lo que valgo, y pronto te percatarás de lo que has perdido.
     No te molestes en volverme a llamar, en mandarme mas mensajes, tiempo no valorado, tiempo perdido.
Tú te lo has ganado amigo, tu no me distes de tu tiempo por lo tanto, yo no te daré del mio.

Tu, yo y un pequeño latido.

Estábamos tu y yo, mirándonos, cara a cara, ojo a ojo, boca a boca. Era como un sueño echo realidad, no parábamos de mirarnos a los ojos, era como... estar a 3 metros sobre el cielo, solo existíamos tu, yo, un pequeño latido y la luna, mas resplandeciente que nunca. Seguro que no te preguntas que era ese pequeño latido, no niegues que te lo imaginas, pero, por si persona alguna no lo sabe yo misma se lo diré, era mi corazón. Nos mirábamos fijamente a los ojos, era imposible apartar la mirada, sentía un calor tremendo, era como si me pusieran un mechero en la planta de los pies. Sentía tu respiración entre cortada y un enorme silencio, tanto que te oía cuando pestañeabas. Llegó el momento, sentí como te acercabas a mi, era como pequeñas explosiones, en ese momento las mariposas de mi estómago, parecían que estaban drogadas, revoloteando y revoloteando, sin parar ni un segundo, hasta que final mente, me besaste.
Desgraciadamente solo fue un sueño, un sueño tremenda mente mágico, tremenda mente hermoso, éramos tu yo y un pequeño latido, mi corazón.